Sobre mí
Técnica Alexander
Juan Margallo
Comencé con la Técnica Alexander cuando buscaba alivio para mis dolores de espalda, causados por una artrosis degenerativa. Un amigo me habló de este método y empecé a tomar clases con Simon Fitzgibbon, en la escuela El Mono y el Madroño.
Con el tiempo descubrí que la Técnica Alexander no solo aliviaba mis dolores, sino que me devolvía la posibilidad de disfrutar de la música y de la vida diaria sin tantas molestias ni angustia. Esa experiencia personal me llevó a formarme como profesor y a dedicarme a enseñar esta técnica.